lunes, 12 de enero de 2009

16

SU AUSENCIA ES MÁS PRESENTE a través de los objetos que dejó atrás, aún a través los objetos que le pertenecían sin haber llegado a ser suyos. Llevábamos varias semanas posponiendo nuestro encuentro; el trabajo, el tránsito, otros compromisos, todo para que nuestra reunión no llegará a suceder. Al final llego a casa sólo para revisar mi bolso y sentir como me empieza a hacer falta, justo al fondo del maletín, un regalo comprado desde su cumpleaños. No se que hacer, no quiero guardarlo como recuerdo de algo que nunca pude darle, no puedo guardar algo que compre especialmente para él, me sabe mal regalarlo a alguien más. Lo único que alcanzo a hacer es dejar el obsequio donde está. Ahora cada vez que recibo una llamada para comer, un mail para una reunión, un mensaje de texto, tengo que mirar al fondo de mi bolso para saber que hacer.

1 comentario:

Sr No quiero dijo...

La ausencia es el mejor sentimiento para quien rompio nuestro ya tan dolido corazon. te quiero.